El Tren Chico.

Pocos medios de transportes -exeptuando el ramal Talca Constitución- han tenido tan notoria incidencia en el desarrollo del turismo como el ferrocarril a Panimávida, conocido como el "Tren chico", debido a su trocha angosta.

El desarrollo de este ramal se debe al notable posicionamiento de los Baños Termales de Panimávida en la vida social y de sanidad de los chilenos en el 1900. Alrededor de 1915 comienza a ser un plus de distinción social el visitar y alojarse en e Hotel durante el fin de semana, situación que era destacada en las revistas nacionales -como la Zig Zag y comunales, como la notable revista Linares.

Durante veinte años este tren fue un factor decisivo en el desarrollo de las comunidades agrícolas del interior de Linares.- Estaciones como Arrayanes, Yerbas Buenas, Abránquil, San Juan (O Francisco Sayago) Rari, Panimávida y Colbún  propiciaron el intercambio económico entre ellos, Linares y el resto del país.

A modo de ejemplo, durante 1926 el tren movilizó en esa ruta, quince mil doscientos tres quintales métricos de carga.

Conforme fue pasando el tiempo y los adelantos tecnológicos tales como el automóvil se hacían más corrientes, el tren comenzó también a perder popularidad. En 1927 -evidenciando el prestigio de las Termas y su importancia en la vida social- la Sra. Olga Cousiño ofreció un premio de $10.000 pesos al automovilista que ganara el tramo Santiago - Panimávida, competencia que se realizó el 20 de abril del mismo año. Partieron 10 competidores a las seis de la mañana desde Santiago, llegando solo 6 a las Termas, cinco horas y media más tarde, siendo el ganador don Carlos Fache.

Respecto del cierre de este tren, que funcionó por 40 años, habían detractores y usuarios, el Presidente Aguirre Cerda ordenó un segundo estudio del problema, esta vez el resultado varió del primero. Esta vez se estimaba conveniente ensanchar la vía, pero hacerla a partir de la estacion de Putagán, en un trayecto que enfrentaba directamente a Yerbas Buenas y siguiendo después una ruta que, finalmente, entroncaba con la que venía de Linares.

Se compraron los terrenos o faja de ferrocarril y entre 1945 y 1950 se realizaron notables trabajos de corte de cerros, puentes e incluso Bodega y casa para el Jefe de Estación. A pesar de que en esa época el camino a Panimávidad estaba bastante expedito y con grandes probabilidades de ser pavimentado, las localidades más lejanas, tales como Abránquil o San Juan, seguían utilizando prioritariamente el tren.

En 1953, ante la notable competencia de los buses y locomocion colectiva, se analizó la posibilidad de suspender este servicio, lo que ocurrió a raíz de un trágico hecho.El 9 de octubre de 1953 a las 16.50 hrs. ocurrió  "la más grande catátrofe ferroviaria de nuestra historia" (Revista VEA del 14/10/53).  El mencionado servicio de tren embistió al microbus Ford que hacía el recorrido Linares - Santa Ana de Queri, que viajaba con sus 28 asientos ocupados y 17 personas de pie.  El camino y la línea férrea se curzaban en el Callejón Largo, lugar donde no habían barreras ni señalización. Varias personas fallecieron y quienes no, sufieron terribles quemaduras, producto de la explosión de la caldera y el derrame de agua sobre el vehículo de locomoción colectiva.

La tragedia, además de conmover a Chile, fue el argumetno utilizado por las autoridades para suspender su recorrido. A pesar del notable aporte que significaba para tanta gente, el "Tren Chico" y sus estaciones pasaron a la historia como un bello capítulo de la historia de Linares.

(Tomado del libro de textos de Jaime González C. y de la Revista Linares)